El complot del 9/11
El 11 de Septiembre es recordado como una de las fechas más tristes marcadas en el calendario. Hace 16 años dos aviones comerciales fueron estrellados por terroristas islámicos contra las Torres Gemelas de Nueva York.
Existen numerosos eventos históricos en el que se finje o se orquesta un autoatentado para iniciar una guerra o ejercer un estado policial. El emperador Nerón incendió Roma para iniciar la persecución de los cristianos. Adolf Hitler incendió el Reichstag para implementar su estado policial y culpar a sus enermigos. El presidente Roosevelt tenía conocimiento del ataque de Pearl Harbor, el cual fue la excusa necesaria para entrar a la Segunda Guerra Mundial. Como detalle cultural, el abuelo de George W. Bush, Prescott, ayudó a financiar a Adolf Hitler y se benefició económicamente de la Segunda Guerra Mundial, en ambos bandos.
Y por supuesto han surgido teorías diferentes sobre el origen de los atentados, y hasta el día de hoy el 9/11 sigue generando sospechas.
Las torres fueron detonadas: Esta teoría señala que la caída de las torres no fue producto del impacto de los aviones, sino de explosivos instalados previamente en el edificio. El físico Steven E. Jones, el arquitecto Richard Gage, el ingeniero de software Jim Hoffman y el teólogo David Ray Griffin argumentaron que no era posible que el impacto de las aeronaves y el fuego resultante pudieran llevar al colapso de las Torres.
Las Torres Gemelas son los primeros edificios hechos de acero que se colapsan totalmente en la historia. Incendios sostenidos de mucha mayor intensidad por mucho más tiempo no lograron colapsar edificios en Madrid, Philadelphia y los Ángeles. Cuando los edificios de acero se incendian permance el core, la medula. Las Torres Gemelas tenían 47 vigas de acero en su centro y de ellas no quedó más que escombros.
Las Torres Gemelas, que fueron construidas para soportar impactos de aviones según sus arquitectos, se colapsaron en caída libre en 8 y 10 segundos respectivamente.
Entre los restos de los tres edificios se econtraron restos de metales fundidos, para que esto pudiera haber sucedido el incendio tuvo que haber llegado a más de 2700 grados farenheit de temperatura algo poco probable si se analiza el color del fuego y del humo.
Las olas de humo generadas por la caída de las Torres son una manifestación física de lo que se llama flujo piroclástico, algo que no se produce a través de un incendio sino de una explosión, similar a la de un volcán.
Una gran cantidad de testigos (incluyendo a la prensa) hablan de explosiones previas a los aviones y previas también a la caída de las Torres. Este testimonio de los bomberos de NY está lleno de controversia.
Si observamos los videos de la caída de las torres se pueden ver squibs, pequeñas detonaciones que indican una demolición. Viendo esto es difícil seguir pensando que las Torres cayeron por un incendio.
Una de las teorías más radicales dice que no se usaron aviones comerciales para atacar las Torres, el Pentágono, ni el misterioso incidente de Philadelphia, el cuál se desintegró misteriosamente sin dejar rastro alguno.
Curiosamente todos los medios de comunicación tienen un testigo que reporta haber visto un avión impactarse de una manera sospechosa. Una reportera de la BBC reporta en vivo el colapso del edificio antes de que suceda.
El avión que supuestamente se impactó en el Pentagono no dejo restos y no se tiene registro del vuelo 77.
En primera instancia un reportero en la escena de CNN, Jamie Mcintyre, dice que que no hay evidencia de que haya sido un avión, que no hay restos de la aeronave, que todo indica que fue una explosión. Después se arrepiente y corrije la historia y dice que vio un avión.
Los aviones solo fueron la fachada para la caída de los icónicos edificios, la cual le dio una excusa a George Bush para invadir Medio Oriente con el objetivo de apropiarse del petróleo.
Lo cierto es que ninguna teoria podria devolver la vida de las miles de personas que han muerto a causa de este hecho.